Dos semanas

Bueno, ya solo quedan dos semanas para que comience la aventura. Básicamente no hay nada nuevo que contar, pero nada de nada. Sigo sin familia y esta situación comienza a rozar la desesperación. Todos están súper felices con los viajes que van a hacer con sus host family y cosas por el estilo y los 10 pringadillos que quedamos en el albergue nos estamos consumiendo, literalmente. Como me den la familia en el aeropuerto o algo así me da algo, pero que se le va a hacer. Mientras tanto me dedico a andar por ahí (ahora con el tema de que me voy, mi padres me dan más libertad #Ventaja1), a disfrutar a tope por todo lo que me voy a perder de la vida fiestera española durante 10 meses y a estar lo máximo posible fuera de casa con viejos y nuevos amigos. Ya están las maletas compradas, los preparativos que antes solo estaban en mi cabeza van materializándose y mi síndrome pre-vacacional me está machacando viva (sí, ese síndrome existe, que me lo dijo el doctor Falken). Daría algún consejo para generaciones venideras pero no se ni qué hacer yo misma con mi vida, así que cuando tenga un poco más de experiencia ya los daré. Una recomendación que si que puedo dar es que os tatuéis la fecha en la que os vais a marchar, así os ahorraréis un montón de saliva, porque si tengo que contar todas las veces que he dicho "6 de Agosto" no me dan los dedos de 800 manos. La #Ventaja2 es que siempre tienes algo de que hablar con la gente, que suele interesarse bastante por el asunto, algunos le llaman morbillo, yo lo llamo "ya me traerás un regalito de allí eh, no te olvides" (otra frase que me han repetido mil y una veces, hasta gente que acababa de conocer). Así que ya sabéis, si os salen amigos hasta debajo de las piedras, sospechad. Pero mientras, a pasarlo bien y disfrutar del tiempo que me queda en esta España bonita. Rezad para que me den una familia pronto:))))))) #PrayForCrysta
XOXO